Capacitan a paterfamilias sobre alimentación escolar

Mérida, Yucatán.- Para garantizar la salud de 22 mil 227 alumnos de 154 planteles de los niveles preescolar, primaria y secundaria que cuentan con servicio de comida, 29 monitores alimenticios del programa Escuelas de Tiempo Completo que opera la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán capacitan a los padres de familia sobre lo que consumirán los alumnos, informó el responsable, Javier Eduardo Troconis Cervera.

Dijo que a través de la estrategia Capacitar, Organizar y Monitorear (COMI) que se puso en marcha hace cuatro meses, los monitores alimenticios han efectuado 265 capacitaciones a padres de familia, 655 visitas de acompañamiento y 484 listas de verificación, acciones apegadas a la norma 251 que determina el establecimiento de lo que se consumirá en los planteles de educación básica.

Manifestó que los monitores son 29 personas con perfil en el servicio de comida, ya sea como técnicos o licenciados en nutrición, los cuales se distribuyen para emplear la estrategia COMI. Cada especialista es asignado a una región para atender entre cinco y siete escuelas.

Entre sus funciones está la formación de los padres de familia en temas como la elaboración de los 21 menús cítricos con los que opera el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Yucatán y que se han incluido dentro del plan.

También está el proceso de higienización de los comestibles, así como los elementos que se deben considerar dentro de una cocina, es decir, procurar que las adecuaciones que se apliquen en infraestructura sean para la seguridad de las personas que elaboran los platillos y aquellos que los van a consumir, o sea los estudiantes.

Apuntó que los monitores interceden también en la organización de los padres de familia para que en correlación con el centro escolar se proporcionen los alimentos a sus hijos de una forma higiénica.

El también especialista en salud pública agregó que la estrategia que aplican estos operadores tiene como objetivo capacitar, organizar, monitorear e informar a todos aquellos agentes que se encuentran dentro de los recintos educativos para fomentar el consumo de un alimentación correcta, equilibrada e inocua, acorde a la edad y como para la etapa de vida en la que se encuentran los alumnos.