- La trova yucateca en la voz de María San Felipe desbordó en un caudal de emociones y sentimientos.
Desde una hora antes el Patio Central se vio ocupado con los
visitantes que empezaban a llegar a tan emotivo evento; gente de todas las
edades se presentaron a escuchar la exquisita voz de la cantante.
Muchos de los espectadores no dudaron en compartir su
experiencia y expresar que durante el concierto vivieron y sintieron
profundamente las canciones de la intérprete; la Sra. Beatriz Vitela comentó
que “escuchar su música y su voz fue sublime, me conecté perfectamente con sus
melodías”.
Al lado del gran guitarrista Luis Andrés Tinoco Ceballos y
con canciones como “Nunca”, “Flor de Azahar” y “Contigo aprendí” María San
Felipe demostró su enorme talento y maravillosa voz; todos los asistentes se
encontraban extasiados con ella.
La cantante engalanó la noche con varias canciones de su
autoría como “Duerme” “Contigo”
“Llévelo, llévelo”, “Libre” y “Esperaba el amor”, que fueron gratamente
elogiadas por los asistentes, pues a su decir les provocaron sentimientos que
fueron desde la nostalgia hasta la alegría.
Y por supuesto que en esta maravillosa tarde, no pudo faltar
el momento de nostalgia, cuando la cantante ofreció como regalo a Don Eduardo
Torres Márques, la canción “Novia Envidiada” en la voz de Andrés Tinoco; Don
Eduardo de origen yucateco y que radica en la Ciudad de México, contó que fue
con esta canción que se le declaró a su esposa a la edad de 15 años.
Fue con la canción “San Felipe” –creada en honor al pueblo
que vio nacer a esta gran cantante y que lleva este nombre- que María San
Felipe cerró este gran concierto envuelta en una multitud de aplausos y vítores
por parte de los asistentes.
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