- Este esquema social beneficia a mil 582 personas en todo el estado.
Del total de personas que se beneficiaron con este esquema
que impulsa el Gobierno del Estado a través la Secretaría de Desarrollo Social
(Sedesol), más del 80 por ciento son mujeres ya que se fomenta su participación
en acciones que las impulsan a salir adelante.
En lo que respecta al 2017, se otorgó un total de 19 mil 164
paquetes de semillas a través de esta estrategia. Las entregas estuvieron
divididas en dos períodos: primavera-verano y otoño- invierno, cada una de
nueve mil 582.
Tal fue el caso de José Cauich Martín y Filomena Nabté Hoil,
quienes desde hace tres años ya no compran vegetales, pues lo que consumen lo
obtienen de su huerto de traspatio, en el que han sembrado y cosechado tomates,
rábanos, chile verde, cebollina, espinaca, repollo, calabazas, pepinos y
zanahorias, entre otros.
Debido a su exitosa experiencia, el longevo matrimonio de
Tecoh confía en que este plan continúe en apoyo de más yucatecas y yucatecos ya
que han corroborado las altas ganancias que trae consigo, puesto que se
encuentran entre las mil personas que en
2016 recibieron herramientas tecnológicas para respaldar esta labor.
El beneficio es doble, pues mis vecinas y vecinos saben que
tenemos bien nuestro huerto, así que cuando quieren algo vienen a comprármelo y
ese dinerito extra que entra lo utilizamos para adquirir otras mercancías, como
galletas para que disfrutemos junto con la familia, explicó Filomena.
El programa se enfoca en combatir la pobreza extrema en los
municipios y comisarías de alta y muy alta marginación de la entidad brindando
paquetes técnicos, para la producción de hortalizas de autoconsumo, lo que
significa un importante ahorro en la economía familiar y, al mismo tiempo, una
ganancia al poder comercializar su excedente.
Asimismo, se implementa en dos etapas, en la primera se les
dota de lo necesario para la realización de su parcela. Mientras que en la
segunda, cada seis meses se les dan semillas. Ambas fases van acompañadas por capacitación y el
seguimiento puntual por parte de la Sedesol.
Por otra parte, el empeño que imprime en su trabajo día con
día para que florezcan sus hortalizas, ha permitido que María Alejandra Balam
Keb tenga una cosecha próspera y haya consolidado este proyecto, lo que le permite ofrecer a sus seres queridos un
alimento sano y también un ingreso extra con la venta de lo que le sobra.
Desde hace seis años, la vecina de Santa Elena recibió este
respaldo y desde ese momento ha sentido el alivio de saber que en su mesa
siempre habrá comida, pues tiempo después también recibió sus aves de traspatio.
"Aquí no nos morimos de hambre porque hay comida y
hasta lo vendemos, de cada hera sacamos hasta 100 pesos porque otras personas
saben que aquí hay rábano, cilantro, chile dulce, hasta berenjena y
garbanzo", apuntó.
No hay comentarios.
Publicar un comentario