
- Inolvidable recibimiento a los campeones
Berlín, Alemania.- Inmediatamente después de derrotar a
Argentina en la final, los jugadores de la Mannschaft empezaron a cantar en el
vestuario: "¡Berlín, Berlín, nos vamos a Berlín!". En esos momentos
de euforia ya mostraban su ilusión por darse un baño de masas en la capital de
Alemania.
Cuando uno gana la Copa Mundial en lo que menos piensa es en
dormir. Por eso, los recién coronados campeones del mundo aterrizaron en Berlín
visiblemente cansados, pero radiantes de felicidad. Philipp Lahm y el resto de
la expedición germana tomaron tierra a las 10:08 del martes 15 de julio en el
aeropuerto de Tegel, donde dio comienzo el festejo junto a toda su hinchada.
Los seguidores empezaron a concentrarse entre la Puerta de
Brandenburgo y la Columna de la Victoria mucho antes de la hora de llegada
prevista de sus héroes. Nadie quería perderse ni un segundo de la celebración
del título mundial. Muchos aficionados acudieron incluso a las zonas públicas
del aeropuerto berlinés para ser los primeros en ver a sus campeones. Los
asistentes estallaron de alegría cuando el aparato procedente de Río, que dio
una vuelta extra sobre la avenida donde se arremolinaban los aficionados, se
detuvo finalmente en la pista de aterrizaje. La puerta se abrió y un sonriente
Philipp Lahm abandonó el Boeing 747-8 con el trofeo entre las manos.
"Vamos a darlo todo y a correr como si fuese un
partido" prometió Thomas Mueller justo antes de subirse con sus compañeros
a un autobús negro. A continuación, ya a bordo de un camión descapotable,
emprendieron el camino a la fiesta multitudinaria que había preparada en la
Puerta de Brandenburgo.
Recibimiento multitudinario en la Puerta de Brandemburgo
"Es un sueño", dijo Wolfgang Niersbach, presidente
de la Federación Alemana de Fútbol, a los micrófonos de ARD sobre el ambiente
que se respiraba en Berlín. "Todo ha empezado en el aeropuerto, cuando los
bomberos nos han recibido con el obligatorio arco de agua. A los jugadores les
ha encantado ese momento. Teníamos muchas ganas de vivir este día en
Berlín".
Cientos de miles de aficionados se congregaron en la zona
habilitada para la ocasión y brindaron a los hombres de Joachim Loew un
recibimiento multitudinario. Un aplauso atronador dio la bienvenida a la
selección cuando subió al escenario, un instante que puso la piel de gallina a
todos los asistentes, no solamente a los integrantes de la expedición alemana.
"Lo estamos pasando grande, sobre todo porque tenemos
la copa aquí con nosotros. Es increíble todo lo que nos han preparado los
berlineses, y la cantidad de gente que había por las calles era
impresionante...", señaló Bastian Schweinsteiger, completamente
impresionado.
"El camino hasta el título fue largo y difícil. Estamos
muy contentos de poder celebrarlo hoy aquí con nuestro público. Vimos muchas
imágenes de Alemania durante el torneo y sabemos que habéis vibrado y os habéis
emocionado con nosotros. De no ser por vosotros, ahora no estaríamos aquí.
Todos somos campeones del mundo", dijo el seleccionador Joachim Loew
dirigiéndose a los presentes. Un momento inolvidable para todos y, sin duda, un
instante para la eternidad. (Fifa.com)
No hay comentarios.
Publicar un comentario