- Las gestiones en el Congreso para someterlo a juicio político por segunda vez están causando “enorme enojo” en la nación y lo calificó como una “cacería de brujas”
Washington.- Antes de su viaje a Alamo, Texas, para supervisar la construcción del muro fronterizo con México, el presidente Donald Trump dijo a la prensa que él no tenía la culpa de la violenta insurrección en el Capitolio de EE.UU. la semana pasada y agregó que sus comentarios a partidarios fueron "totalmente apropiados".
--"La gente pensó que lo que dije era totalmente apropiado", dijo Trump. "Y si miras lo que han dicho otras personas, políticos de alto nivel sobre los disturbios durante el verano, los horribles disturbios en Portland y Seattle y varios otros lugares, ese fue un problema real".
El portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, dijo que la visita a Texas marcaría la "finalización de más de 400 millas de muro fronterizo por parte de Trump, una promesa hecha, una promesa cumplida, y los esfuerzos de su Administración para reformar nuestro sistema de inmigración quebrado".
Declaró que las gestiones en el Congreso para someterlo a juicio político por segunda vez están causando “enorme enojo” en la nación pero que él no está a favor de la violencia.
En conversación con reporteros en la Casa Blanca, el mandatario saliente expresó: “Realmente es algo terrible lo que están haciendo”, pero añadió: “no queremos violencia, nada de violencia”.
Calificó el juicio político que podría enfrentar en la Cámara de “ridículo” y un “peligro” para el país.
--“No queremos absolutamente ninguna violencia. El juicio político es realmente una continuación de la mayor cacería de brujas en la historia de la política. Es ridículo. Es absolutamente ridículo”, declaró.
“Este juicio político está causando un tremendo enojo y ustedes lo están haciendo y es realmente algo terrible lo que están haciendo”, agregó, en sus primeros comentarios públicos desde el ataque al Capitolio.
“Que Nancy Pelosi y Chuck Schumer continúen por este camino, creo que está causando un tremendo peligro a nuestro país y está causando una gran ira. No quiero violencia”, concluyó Trump antes de cruzar el jardín sur hacia el helicóptero Marine One.
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