Mérida, Yucatán.- Datos aportados por la Fiscalía General
del Estado (FGE) en audiencia efectuada esta tarde en el Centro de Justicia
Oral de Mérida, determinaron la vinculación a proceso de Enrique L. G., de 35
años de edad, y Pablo S. G., de 33 años, éste último originario del Distrito
Federal, acusados del delito de homicidio calificado en contra del psiquiatra
Felipe Triay Peniche.
En el desarrollo de la audiencia programada, el Juez de
Control, Luis Edwin Mugarte Guerrero, admitió los datos aportados por la parte
acusadora, por lo que los sujetos -también psiquiatras de profesión-,
continuarán bajo proceso y sujetos a la medida de prisión preventiva durante
los próximos seis meses.
Su imputación y posterior vinculación derivó tras el
cumplimiento de la orden de aprehensión solicitada al Juez correspondiente, por
lo que los especialistas fueron detenidos en días pasados acusados del citado
delito.
La serie de diligencias efectuadas por la Fiscalía General
del Estado (FGE), luego del hallazgo del cuerpo en la propia camioneta del
médico, la cual fue abandonada en el estacionamiento de un centro Comercial de
Ciudad Caucel, concluyó en el esclarecimiento del hecho que ya se ventila en
los juzgados de control.
Cabe señalar que el monitoreo del sistema de cámaras de
video de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), estudios de planimetría,
levantamiento de huellas, pruebas de luminol para detectar rasgos de sangres,
exámenes químicos, entre otros, fueron parte del trabajo de investigación
científica que contribuyeron a la localización de los presuntos responsables.
De acuerdo con los datos que integran la carpeta de
investigación, el crimen se registró el pasado 16 de agosto en un predio de la
calle 25 por 22 de la colonia García Ginerés, a donde Triay Peniche fue
conducido bajo engaños para ser ultimado con un arma blanca.
Como parte del proceso, la parte acusadora tendrá un plazo
de dos meses para el cierre de la investigación, por lo que continúan las
indagatorias sobre el caso de las que se desprenderá el desahogo de pruebas, en
una nueva fase judicial de este caso.