#UnDiaComoHoy, 29 de junio, nacieron el dramaturgo Giacomo
Leopardi, el escritor Antoine de Saint-Exupery y el compositor mexicano José
Pablo Moncayo; murieron el pianista Ignacy Jan Paderewski y los escritores
Irving Wallace y Melitón Barba.
#LaFraseDelDia “Amar no es mirarse el uno al otro; es mirar
juntos en la misma dirección”: Antoine Marie Jean-Baptiste Roger Conde de
Saint-Exupéry fue un escritor y aviador francés, autor de la famosa obra El
principito.
Antoine de Saint-Exupéry
Antoine Marie Jean-Baptiste Roger Conde de Saint-Exupéry,
nació en Lyon el 29 de junio de 1900 y murió en Isla de Riou el 31 de julio de
1944. Fue un escritor y aviador francés, autor de la famosa obra El principito.
Antoine, que pronto quedó huérfano de padre, se crio en el
entorno femenino de una familia aristocrática arruinada de la ciudad de Lyon
(su madre trabajaba como enfermera). Hizo el bachillerato en 1917 y, tras ser
rechazado en la Escuela naval, se hizo piloto cuando estaba cumpliendo el
servicio militar en 1921, en Estrasburgo.
A través de su amistad con el también piloto y pionero de la
aviación Henry Guillaumet, en 1926 fue aceptado en la compañía Latécoère (la
futura Aéropostale y luego germen de Air France), donde a su vez entablaría una
larga amistad con otro aviador, en aquel entonces ya considerado un loco héroe
francés, Jean Mermoz. Los tres pilotos protagonizarían a lo largo de sus
azarosas vidas algunas de las hazañas más conocidas durante los primeros años
de la aviación en Europa, Medio Oriente, África, América del Sur y el Océano
Atlántico.
Antoine no tardó en integrarse en la escuadrilla de pilotos
que cubrían los tramos de “la Línea” que transportaba el correo entre Toulouse,
Barcelona, Málaga, Tetuán, Sahara español, hasta las antiguas colonias
francesas, en lo que luego sería Senegal. A finales de 1927 fue destinado como
jefe de escala a Cabo Juby, entonces bajo administración española, donde inició
con cierta constancia su vocación literaria. En 1928 se trasladó a Sudamérica.
En 1928 se publicaría Courrier sud y en 1931 Vol de nuit, que le supuso un gran
éxito al obtener el premio Femina; ambas giran en torno a sus experiencias como
aviador.
En Buenos Aires, donde conoció a quien sería su esposa, la
millonaria salvadoreña Consuelo Suncín, fue nombrado director de la empresa
Aeroposta Argentina, filial de la Aéropostale, donde tuvo la misión de
organizar la red de América. A partir de 1931, la progresiva bancarrota de la
Aéropostale puso término a uno de los capítulos más épicos de los pioneros de
la aviación, aunque todavía se extenderían sus hazañas hasta la revolución
aeronautica provocada por la Segunda Guerra Mundial.
Desde 1932, y dadas las dificultades de su empresa,
Saint-Exupéry se consagra al periodismo y la escritura. Hace reportajes sobre
la Indochina Francesa (hoy Vietnam) en 1934, sobre Moscú en 1935, y sobre
España en 1936, previos al inicio de la Guerra Civil en este último país. Sin
embargo, no dejó de volar como piloto de pruebas, participando en algunos
«raids» o intentos de récords, que en ocasiones se saldaron con graves
accidentes, como el ocurrido en la zona del Sahara vecina a Egipto en 1935.
El 30 de diciembre de 1935, después de un viaje de 19 horas
y 38 minutos, Saint-Exupéry y su navegador André Prevot se vieron obligados a
realizar un aterrizaje forzoso en la parte de Libia del desierto del Sahara, en
camino a Saigón. Su avión era un Caudron C-630 Simoun n7041 (matrícula F-ANRY),
con el que pretendían batir el récord de tiempo de vuelo de París a Saigón por
un premio de 150 000 francos.
Ambos sobrevivieron al aterrizaje, pero sufrieron los
estragos de la rápida deshidratación en el Sahara, no tenían idea de su
ubicación y, según sus memorias, lo único que tenían para alimentarse eran
uvas, dos naranjas y una pequeña ración de vino. Experimentaron alucinaciones
visuales y auditivas, para el tercer día estaban tan deshidratados que dejaron
de transpirar y finalmente, al cuarto día, un beduino en camello los descubrió,
y les salvó la vida.
La última misión de reconocimiento de Saint-Exupéry fue para
recoger información para la inteligencia sobre los movimientos de las tropas
alemanas en el valle del Ródano y sus alrededores antes de la invasión aliada
del sur de Francia, conocida como Operación Dragon. El 31 de julio de 1944, a
las 8:45 horas, despegó a bordo de un Lightning P-38 sin armamento de una base
aérea en Córcega, con una autonomía de vuelo de 6 horas.
Como no regresó, a las 13:00 el capitán René Gavoille
(comandante de la escuadra), advirtió a los radares acerca de la desaparición
de Saint-Exuperý. A las 14:30, el avión se dio por desaparecido. El 1 de
agosto, una mujer informó haber visto un accidente aéreo alrededor del
mediodía, cerca de la bahía de Carqueiranne junto a Tolón. Un cadáver sin
identificar que llevaba insignias francesas fue encontrado varios días después
al este del archipiélago Frioul al sur de Marsella y enterrado en Carqueiranne
en septiembre.
Obras
- 1926: El aviador
- 1928: Correo del Sur
- 1931: Vuelo nocturno
- 1939: Tierra de hombres
- 1942: Piloto de guerra
- 1943: El principito2
- 1944: Carta a un rehén
- 1948: Ciudadela
- 1953: Notas de juventud
- 1953: Cuadernos
- 1955: Cartas a su madre
- 1982: Escritos de guerra
- 2007: Manón, bailarina
- 2008: Cartas a lo desconocido.
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