Mérida, Yucatán.- Elementos de la Fiscalía General del Estado, adscritos al
Escuadrón Táctico de Reacción Inmediata, desarticularon un intento de engaño
telefónico, tras atender el llamado de un vecino del fraccionamiento
Residencial Pensiones, quien solicitó auxilio ante el supuesto secuestro de su
hija por parte de desconocidos.
Luego de varias llamadas telefónicas en las que hicieron
creer a la víctima que su hija estaba en peligro, el afectado pidió apoyo a los
agentes ministeriales, momentos antes de depositar los primeros 25 mil pesos
que le habían exigido.
Tras el llamado de auxilio, los elementos de la FGE
contactaron al afectado, quien contó que sonó su teléfono y al contestar le
hicieron saber que supuestamente su hija había sido privada de su libertad, por
lo que los elementos ministeriales iniciaron el operativo para desactivar el
engaño.
Los agentes reportaron que recibieron un llamado por parte
del C. Asael Cetina, de 59 años de edad y vecino del fraccionamiento
Residencial Pensiones V Etapa, señalando que un sujeto le había llamado a su
teléfono de casa para exigirle en primera instancia la citada cantidad de
dinero porque tenía secuestrada a su hija, poniéndole al auricular la voz de
una persona del sexo femenino que lloraba al tiempo que le decía que era su
hija y que la habían secuestrado.
La comunicación con la fémina fue interrumpida por la voz
masculina que exigió el pago de dicha cantidad si quería volver a ver a la
supuesta víctima, proporcionando un número de cuenta del Banco Azteca a nombre
de “Davíd Sebastián Castañeda Galván” y tras obligarlo a que les diera el
número de su teléfono celular, el sujeto comenzó a hostigarlo por medio de los
teléfonos 4774009847 y 6644640891 que corresponden a números foráneos.
Entre las exigencias le pidieron que describiera la forma en
que iba a ir vestido al banco para poder identificarlo y para asegurarse que
iba a realizar el depósito, para después indicarle donde iba a ir por su hija.
Al llegar al lugar, los elementos de ETRI contactaron a la
hija del afectado, una joven de 28 años, confirmando que se encontraba bien y
estaba totalmente ajena al drama que estaba viviendo su padre, a quien se
recomendó acudir ante el Ministerio Público para denunciar y dejar constancia
de la anomalía en previsión de que otras personas puedan ser nuevas víctimas.
Ante el hecho, se reitera la importancia de mantener la comunicación entre familiares
antes de proporcionar información a quienes realizan llamadas de esta índole,
ya que de esa manera se combate este tipo de delitos y se evita que más
personas caigan en este tipo de engaños.