Rita Cetina Gutiérrez | Mujeres Ilustres de Yucatán

Rita Rosaura Cetina Gutiérrez (Mérida, Yucatán 22 de mayo de 1846 - 11 de octubre de 1908). Fue pionera de la educación y el feminismo en México. fundadora de la sociedad y escuela femenina la "Siempreviva".

Fue hija de Don Pedro Cetina y de Doña Jacoba Gutiérrez: Su padre muere en acciones militares dejándola huérfana a temprana edad. Su tutor Don Domingo Laureano le dio instrucción privada como profesora. Comenzó a escribir a los 16 años de edad, plasmando en un álbum personal ensayos poéticos relacionados con el amor filial y fraterno.

Fue alumna de literatura de los intelectuales cubanos Domingo Laureano Paz y Félix Ramos y Duarte, que residieron en Yucatán, el trabajo en favor de la condición femenina en Yucatán se inició alrededor de 1870 gracias a la tenaz tarea de Rita Cetina.

En 1866 se le reconoce como poetisa al presentar en público una composición dirigida al Coronel Daniel Traconis, quien regresaba triunfante de una batalla en Tihosuco donde combatió a los mayas rebeldes, como parte de la Guerra de Castas que había iniciado en el mes de julio de 1847.

Cada vez se hace más evidente en espacios como las Veladas Literarias en Yucatán, donde tuvo oportunidad de darle voz a sus poesías. Por ejemplo, Cetina publica un discurso alusivo a la Batalla del 5 de mayo de 1862 en Puebla, precisamente en la conmemoración de este hecho, un 5 de mayo de 1869. 

1870 fue un año de suma importancia en la vida de Rita Cetina Gutiérrez. En un lapso muy corto de tiempo se encontraba organizando y dirigiendo tres proyectos: una sociedad, una escuela y una revista. Lo primero que surge es la sociedad, ésta da origen a dos proyectos más ambiciosos, una escuela de instrucción primaria para niñas pobres y la publicación de una revista dirigida por mujeres para mujeres. Las tres compartiendo el mismo nombre, La Siempreviva, y el mismo fin: “la educación de la mujer por la mujer”. El 3 de mayo de 1870, se inauguraba la escuela, y el día 7 del mismo mes salía a la luz el primer número de la revista.

Fue promotora, junto con otras educadoras de la época como Ángela González Benítez, Gertrudis Tenorio Zavala, Cristina Farfán de la educación laica y de las mujeres en el Yucatán decimonónico. 

Fue reconocida por sus ideas avanzadas en aspectos educativos para las mujeres y en términos de su participación en la vida social, cultural y profesional.

Después de haber fundado su escuela, La Siempreviva, y haberla dirigido durante 7 años, fue nombrada directora del Instituto Literario para Niñas, que fue la escuela para mujeres más importante de su época en Yucatán. Por esta razón cerró temporalmente La Siempreviva, misma que reabrió en 1879, manteniéndola en funcionamiento hasta su clausura definitiva en 1886.

Como directora del Instituto Literario realizó una tarea de modernización y actualización de los sistemas educativos que también promovió en las escuelas públicas del resto del estado. Durante esa época colaboró en numerosas revistas y publicaciones de la época, como La Revista de Mérida; La Biblioteca de Señoritas; El Repertorio Pintoresco; La Guirnalda; La Esperanza; El Recreo del Hogar. Impulsó siempre el mejoramiento de la educación para las mujeres y la igualdad de géneros. Influyó por este hecho en no pocas personas que continuaron su lucha como fue el caso de Elvia Carrillo Puerto, quien fue su alumna.

Como reconocimiento a su tarea educativa, existe en Mérida, su ciudad natal, una escuela primaria que lleva su nombre. También existe en esa ciudad un monumento erigido en su memoria.

Algunas de sus composiciones poéticas fueron firmadas con el seudónimo Cristabela.

Deudas de corazón (drama teatral)

Oda a los héroes de Tihosuco (1886)

A México (1867)

"A nuestro sexo"